Entre la historia y la histeria

Lo que cuenta en el fútbol es lo que pasa en el campo, no todo lo que hay detrás de un equipo, su historia, su patrimonio material y humano, su reconocimiento universal, su grandeza…Aunque al Barça le metieran una goleada en Montjuïc, seguiría siendo más grande que el Espanyol, pero…iría por detrás en la clasificación y le habría dado al vecino pobre unas ínfulas que lo convertirían en insoportable. Si Dani Sánchez Llibre, que tan simpático me cae con su orginal dialecto catañol, ya saca pecho ahora que apenas se ha comido un rosco, no veas quién lo aguantaría la semana que viene. No, no y no: a Montjuïc hay que subir sin miedo pero con mucha concentración, convencidos de que en estos momentos es más difícil puntuar en Montjuïc que en Valencia o Sevilla, que Valverde la ha dado al equipo perico una consistencia y un estilo que lo convierten en uno de los rivales directos del Barça: sí, sé que ofende leer esto, pero mirad la tabla y a ver si no es un rival directo. Sin serlo, el año pasado nos birló la liga del bolsillo. Si los nuestros tienen lo que hay que tener, eso sería suficiente para que subieran a Montjuïc como subió Primero Carnera contra Paulino Uzkudum (tarea que os pongo para el google), y que en vez de darles una tarde para la historia, les demos razones para la histeria.

Positifo: que Boca Juniors, para echar una cortina y tapar su fracaso en la Liga, se haya apresurado a fichar finalmente a Juan Román Riquelme, poniendo fin a la aventura europea de este peculiar y controvertido futbolista, que el Barça fichó por presión mediática (lo mismo que Saviola) y resultó un fiasco monumental, y la demostración clara de cómo no se deben hacer las cosas.

Nejatifo: que Thierry Henry, que llevaba meses sin jugar en el Arsenal y en la selección francesa por una misteriosa lesión –tan misteriosa que gran parte de la prensa inglesa y yo llegamos a creer que era inventada-, ahora resulta que estaba lesionado de verdad. O eso parece. Esos contratos tan magníficos que firma el Barça, ¿por qué no incluyen un plazo de garantía con cláusula de devolución y/o de indemnización? Que Robben costara al Madrid 12 millones más, y esté aún más tarado, no me sirve de consuelo ni de disculpa.

¡Bon dia, bona sort y bon viatge a Ítaca!