El retorno de Xavi

Xavi vuelve al equipo en el momento más oportuno. Debe adquirir un poco de ritmo, de confianza y de tono físico antes de la final de París y, ojo, que no estoy diciendo ya que la juegue como titular. Pero estoy convencido de que para Rijkaard no es una mala noticia la vuelta de Xavi. Seguro que no habrá dicho eso que Sandro Rosell le atribuye sobre Ronaldinho: “Es muy bueno, sí, pero ¿dónde lo pongo?”. Frase idéntica a la que, por cierto, once años antes antes se atribuyó a Johan Cruyff sobre Iván de la Peña. Pero hasta los más acérrimos iniestistas deben ver el retorno del Safi, como le llamaba mi admirado Louis van Gaal, como un factor positivo, estimulante para todos y para todo, empezando por la competencia. Ver que el Barça posee ese magnífico par de organizadores, surgidos de su cantera, me hace pensar en esa escuela de “medios centro” que ha sido el Miniestadi. La cosa, para no irnos al parque jurásico, empezó con Luis Milla, siguió con Guardiola, Celades, Xavi, Arteta, Iniesta y Cesc Fàbregas. Todos están jugando ¡hasta Guardiola!, y podríamos añadir otro tipo de organizadores del juego, de la misma estirpe pero de naturaleza más heterodoxa: Gerard, De la Peña y Motta. La vuelta de Xavi coincide con un grandísimo momento de juego de Andresín, pero también con un ligero bache de Deco (no jugó en Milan y el equipo fue como una moto) y con la pájara mental a que ya nos tiene acostumbrados Motta. Yo, a un centro del campo con Edmílson, Xavi e Iniesta, tampoco le haría ascos.

Positifo: que podamos ser campeones esta misma tarde si pincha el Valencia pero que no exista ansiedad ni obsesión en el entorno blaugrana, sino un clima de serena naturalidad.

Nejatifo: que pese a que puede ser pichichi y pese a la amarga experiencia de la temporada anterior, cuando en dos partidos perdió el pichichi y la Bota de Oro, Samuel Eto'o para ser nuevamente víctima de la ansiedad y la obsesión por el gol, con nocivas repercusiones para el equipo.

¡Bon dia, bona sort i bon aliron!

¿Entrada para la final? Al fondo a la derecha

¿Estará Joan Gaspart en Saint-Denis como invitado de honor de Tachito? ¿servirá el catering en la tribuna de Vip's? A estas alturas, ya no me extrañaría nada. El libelo de Jordi Badía -”Crònica del nuñisme”- explica como si se tratara de una inteligente estrategia, que gracias a Tachito, Murtra y Ricard Huguet (sempiterno golpista que ahora llama tejeros a quienes hacen gala de exquisita diplomacia) se forzaron las elecciones que llevaron a Gaspart al poder y al Barça al desastre. “Cuanto peor, mejor”. Gaspart jugó su papel, fue fundamental para que libros como ese y una pertinaz campaña de propaganda, hiciera creer al personal que el nuñismo era eso (Gaspart) y no lo otro (supercontratos y gente tan válida como el propio Núñez, Parés, Maxenchs, Alemany, Valero...). Yo me imagino una conversación de este tipo: “Tu te cargas el club en dos años, lo dinamitas, y luego aparecemos nosotros como salvadores”. Así fue y, después, si te he visto no me acuerdo de levantar alfombras en las que aparecería mugre demasiado comprometedora para todos. Y venga a darse el pico, a compartir mesa y mantel, a ir cogidos de la mano en la Federación. Ardo en deseos de que aparezcan nuevos libelos en los que se expliquen complicidades, tramas ocultas, intereses inconfesables y queden retratados los protagonistas de este gran ambolao del que el socio es sujeto paciente e inocente.

Positifo: que Saviola y Rochemback jueguen la Copa de la UEFA, lo que demuestra que el problema deportivo de la etapa más nefasta del Barça, pese a que rebosaba pasta gracias al traspaso de Figo (y no había más porque no se traspasó a Rivaldo), fue el quedarse con futbolistas no malos pero sí de un segundo nivel pero pagados a precios de estrellas (añádase Christanval, Geovanni, Riquelme...).

Nejatifo: que servicios internos haya convertido este blog, hasta ahora una polémica plataforma de debate, en una oficina de adquisición de entradas para la final de París, un tema que a mi, personalmente, me importa un pimiento.

¡Bonne nuit, bonne chance y Bonie Em!

Gran Barça, penoso Madrid

Gran Barça, aún admitiendo que recibió la ayudita arbitral en el gol mal anulado a Shevchenko. Un Barça que por fin llega a una final de la Copa de Europa sin sufrir, sin colgarse de proezas como la que necesitó el Dream Team, con el gol de Bakero en Kaiserslautern, cuando ya teníamos un pie fuera; o como el impensable hat trick de Pichi Alonso para meternos en la final de Sevilla, a la que casi valía más no haber acudido. Esta vez, después de ganar en casa del Chelsea y del Milan, la presencia del Barça en la final no sólo es merecida y justa sino que es un regalo para la propia Liga de Campeones y para todos los amantes de este deporte. Después de superar dos finales anticipadas, ante Mourinho y Shevchenko, a la tercera va la vencida: Ronaldinho contra Thierry Henry. Este no será el partido del siglo sino el del nuevo milenio.
Y, como ya era imaginable, el Madrid es la principal víctima de los estragos colaterales causados por la eclosión Barça. Hace unas semanas, nuestros colegas madrileños se daban con un canto en los dientes con que FM (¿Funeraria Mandril?) les trajera a Benítez, Ancelotti, Wenger...Si hiciéramos una recopilación de prensa de este período, hallaríamos noticias como: "Mourinho no para de ofrecerse", "Koeman, va a ser que no"...¿Recuerdan los siete magníficos, los entrenadores que FM barajaba para el banquillo, sin decidirse? ¿Y la de jugadores que supuestamente perdían el trasero por ir al Madrid? ¿Qué ha sido de Diarra, Ibrahimovic, Henry, Cesc Fàbregas...? Parches, apósitos mediáticos con los que día a día se trataba de suturar una herida de difícil cicatrización.
Ahora, como el modelo por el que suspira lo tienen en el Camp Nou, buscarán por todos los medios una réplica de Laporta (Carlos Sainz), una de Rijkaard (¿Van Basten?) y una de Ronaldinho. ¿Réplica de Ronaldinho? ¿No habíamos quedado que aquel Robinho que encandiló en Cádiz era mucho mejor...? Si no fuera tan penoso, daría risa.

Positifo: el comportamiento del barcelonismo, dentro y fuera del campo, en la explosión de euforia sin extremismos que siguió a la clasificación para París.

Nejatifo: el mal perder de los italianos, que atribuyen al error del árbitro, cuando antes del descanso ya cometió otro0 error tan grave o más de no expulsar a Costacurta.

¡Bon jour, bonne sorte et Vive le Barça!

Ojito con este Arsenal

Espero un Arsenal menos miedoso en París. Han sido resultadistas en exceso: no tarjetas, no lesionados, no goles, no eliminados. La figura de los gunners es Thierry Henry pero su hombre talismán es Jens Lehmann (portero que no triunfó en el Milan) y que por algo, a sus 36 años, acaba de quitarle el puesto en la selección alemana a Oliver Kahn. El equipo me ha parecido un lobo con piel de cordero: sólo se la habría sacado si le metían un gol, cosa que no ha sucedido. Me temo que Titi Henry, por muchas ganas que tenga de jugar en el Barça, no puede repetir en Saint Denis, y a las puertas de un Mundial, un partido claudicante como el de esta noche. Ha soltado al sueco Ljungberg y al sevillano Reyes a que se batieran con los del batiscafo y él ha quedado au dessus de la melée. Pero, como el fin justifica los medios y yo quería al Arsenal en París, no me importa que el equipo londinense no haya repetido la exhibición del Bernabeu. Y por eso no menospreciaría yo ni mucho menos a este equipo en la final: hoy ha decepcionado pero eliminó al Madrid y a la Juve. Ojo al dato.

Positifo: el entusiasmo del público de Villarreal y la entrega de algunos jugadores amarillos (Javi Venta, Senna, Franco...), frente a las figuras del equipo, especialmente Riquelme y Forlán, que una vez más han demostrado por qué no triunfaron en un equipo más grande. Qué lástima, verlos de nuevo en la Intertoto.

Nejatifo: que en una directiva que ha tenido que echar por presión popular a un conspicuo franquista, haya alguien con el cinismo de comparar a Rosell con un golpista. Y que lo hagan desde la aberración cultural y la mezquindad ideológica de equiparar un libro con una metralleta. Afirmaciones de ese jaez invalidan a quien las hace para ocupar ningún cargo en el Barça.

¡Bona nit, bona sort i visca el Barça!

Quiero al Arsenal

Lo siento por toda esa España que desearía verse representada en el Villarreal frente al Barça. Lo siento también por el batiscafo amarillo. Pero me asiste un derecho para no quererlo ni en pintura en la final de París: ¡quiero la Copa!. Y si quiero la Champions prefiero tener delante a un equipo de colegiales como el Arsenal que a los gauchos de Martín Fierro. Tan admirables como temibles: legionarios que coleccionan copas Libertadores e Intercontinentales y que soportan las más intensas presiones con la misma entereza con que dormirían a la intemperie en pleno invierno austral en la Patagonia. Quiero al Arsenal, quiero un duelo Barcelona-Londres, quiero ganarle al primer equipo de la city que llega (que legaría) a una final de la Copa de Europa. Y, como lo quiero y lo siento, lo digo.

Positifo: la gran acogida del barcelonismo al libro de Sandro Rosell, que prueba el tirón, mezcla de morbo y glamour, del ex vicepresidente mártir, y de la desconfianza que existía entre la opinión pública sobre las versiones oficiales, las únicas que hasta ahora habían circulado, sobre sus desavenencias con Laporta y el staff técnico interno y exterior del Barça.

Nejatifo: que Tachito se haya pasado los estatutos del Barça por l'entrecuix, en un claro menosprecio a la tradición democrática del club y en contra de lo que pregonaba antes de tomar el poder. Tras denunciar que antes en el Barça votaban hasta los socios ya desaparecidos, ahora no podemos votar quienes todavía no hemos pasado a mejor vida.

¡Bona nit, bona sort i Visca el Barça!

"Un llibre, una rosa i una lliga"

Si el Valencia pierde en San Mamés, lo que no tendría nada de extrañar dadas las ayudas que recibe el Athletic para evitar el descenso, el Barça debe ganar en Sevilla. No me va lo de especular con el resultado. ¿Que juegan los reservas? Me da lo mismo: los reservas del Barça están capacitados para ganar al Sevilla, buen equipo pero que viene de vaciarse en Alemania ante el Schalke. Y ganar el dia de Sant Jordi sería un sublime modo de honrar al patrón de Catalunya. Sostengo, además, que ese sería el mejor modo de preparar el recibimiento al Milan, con un Camp Nou rebosante de entusiasmo. Quienes comparan la situación actual con la previa a aquella maldita final de Atenas, no tienen ni idea de lo que dicen: les han comido tanto el coco que desconocen nuestra propia historia. Para empezar, aquella Liga no la ganó el Barça sino que la perdió el Depor, y de ahí el efecto sorpresa y todo lo que desencadenó, incluída una desmesurada efusión de soberbia por parte de quienes debían dar ejemplo de serenidad. Y, la final Europea, no la ganó el Milan de Capello (con Tassotti, Panucci, Boban, Massaro, Galli, Nava...) sino que la perdió el Barça de Cruyff (con Zubizarreta, Guardiola, Koeman, Stoichkov, Romário...). O sea, que no vengamos con comparaciones odiosas.

Positifo: que el Milan está ya a sólo tres puntos de la Juventus, que parecía inalcanzable, aunque el triunfo en Messina lo ha pagado el equipo de Ancelotti con las lesiones de Ambrossini, Kaká, Cafú y Gattusso, todos los cuales son dudosos para el Camp Nou o jugarán tocados.

Nejatifo: que el fútbol ramplón, destructivo, perdedor de tiempo, anticuado y aburrido del Liverpool, se haya impuesto al juego jovial, atacante, limpio, directo y sin trampa del Chelsea en la semifinal de la FA Cup disputada esta tarde en Old Trafford.

¡Bona Diada de Sant Jordi, bon Aliron i Visca el Barça!

La Champions de Sandro

Escribo con la entrevista de Mònica Terribas (mi ídola) a Sandro Rosell aún en la retina. Casi como la de la madrugada anterior entre otros dos de mis más admirados personajes del mundo mediático: Buenafuente y Serrat. Ayer le dí un tirón de orejas a Sandro en Mundo Deportivo por jactarse de haber contribuído a engañar al sosi con el embolado electoral de Beckham y por haber puesto en bandeja de su amigo Florentino Pérez el fichaje-puñalada trapera de Figo (aunque entonces él obraba con la frialdad del ejecutivo de una multinacional). Hoy vuelvo a rendirme ante la capacidad de seducción de un personaje que podría ser la versión masculina de Madonna: morbo y glamour a grandes dosis. Su campaña de promoción del libro es un éxito: ha pasado ya por tres programas estelares, el de Buenafuente, el de Xavi Bosch y el de Mònica. Cada vez más seguro (¡la seguridad que da haber agotado la primera edición en tres días!), con un aplomo que empequeñece a sus adversarios, con unas dotes de persuasión que, perdonadme la comparación, Tachito ni ha soñado, y siempre desde un barcelonismo de incuestionable pedigrí. ¿Cómo puede haber barcelonistas que quisieran ver condenados al perpetuo silencio a los personajes más válidos de nuestra comunidad? ¿Hemos de ser un club de borregos? ¿Tanto pánico le tenemos a la verdad? ¿Tanto tienen que ocultar los líderes que nos gobiernan? ¿Tanto queremos que nos coman el tarro?

Positifo: el gran paso dado por el Sevilla en la Copa de la UEFA, lo que potencia el papel de nuestra liga (podría tener tres de los cuatro finalistas europeos) y, en consecuencia, valora más el título de campeón de Liga.

Nejatifo: que, de acuerdo con las denuncias formuladas no sólo por Sandro Rosell sino por las versiones más extendidas que circulan por el barcelonismo, la dos personas que toman las decisiones en el club, tanto en lo deportivo como en los instuticional, “están sin estar”. Y, como el hecho es tan notorio y de dominio público, evito citarlas, no por desdén sino por consideración a quienes deberían llevar las riendas del club y son simples hombres de paja.

¡Bona nit i Visca el Barça!

Núñez ha vivido equivocado

A uno le hacen grande sus rivales. Tachito se hizo grande como rival de Núñez (fijaros que nunca se posicionó contra Gaspart) y Rosell se hace grande como futurible en la presidencia azulgrana ante el actual capitoste. Y los forofos del presidente, asiduos a este blog que yo llamo jocosamente Rincón del laportista, deberían ser los primeros en celebrar esta aparición de Rosell, después de tanto quejarse de falta de nivel en el entorno. Imagino a los laportistas felices de que su líder ya no sea acosado sólo por los Majó, Minguella y otros ex candidatos (avalados por un buen puñado de firmas y votos, lo que ya debería darles voz y voto en la Asamblea) sino por un personaje del carisma de Rosell. Alguien que llegó al Barça con un currículum y una mundología muy superior al del presidente, si bien en lo tocante a viajes Tachito no para: empezó por Andorra pero ya lleva casi tantas vueltas al mundo que Samaranch.
¿El libro? Me parece nada oportunista su aparición porque el momento no es favorable al autor, y pone al alcance del gran público muchas cosas, la mayoría de las cuales ya eran conocidas por los periodistas pero, unas veces por falta de espacio, otras por falta de ganas, hasta hoy no habían visto la letra impresa. Otra cosa son las tertulias: Minguella se ha hecho un hartón de denunciar que el acuerdo con el Manchester United por Beckham fue un embolado electoral. Está en su derecho de denunciarlo porque él fue candidato y esa maniobra (de la que Sandro se jacta en su libro, por lo que le doy este jueves un tirón de orejas en la contra de Mundo Deportivo), contaminó la campaña y las elecciones. Todo lo cual me lleva a concluir que Josep Lluís Núñez, mi admirado presidente, el ser superior de la historia azulgrana, ha vivido equivocado: "Al sosi se le puede engañar".

Positifo: que Maxi López, que en esta casa cuenta con muchos y entusiastas seguidores, sea titular el domingo en Sevilla y, por esos caprichos del fútbol, se casque un par de goles (recordad que ahí es donde Kluivert salvó el pescuezo a Rijkaard), que esos puntos le den el título al Barça y para la historia esta pase a ser la Lliga de la gashina o la Maxi Lliga. ¡Qué pasada!

Nejatifo: el partido de Highbury entre el Arsenal y el Villarreal. Bravo pero zafio por parte del equipo amarillo y decepcionantes los gunners, con un Thierry Henry poco implicado y que no estuvo a la altura que el choque requería. Pero lo peor de todo fue el árbitro ¡austríaco! (al Chelsea en Betis le pusieron un luxembuegués), permisivo con el antifútbol de la defensa amarilla y cobarde al señalar el final cuando Riquelme iba a lanzar una falta peligrosa.

¡Bona nit, bona sort i visca el Barça!

A París en "business class"

Glorioso Barça en San Siro. Esta vez, exhibición sin peros. Esta vez, sin dejar ninguna coartada a su rival. Con claridad, con limpieza, con brillantez, casi con austeridad. Escribí el jueves en Mundo Deportivo que lo que perdíamos con la baja de Messi lo ganábamos en madurez con la presencia de Giuly. ¡Bingo!. Sin Xavi, sin Deco, sin Messi, con Márquez saliendo de una lesión y amenazado de perderse la vuelta (ojo, no vayamos a perderlo para la final, y lo digo aunque alguien me acusará de ver el lado nejatifo), con un Ronaldinho que tardó en entrar en materia, el Barça ofreció un recital. Iniesta, por fin, cuajó esa gran actuación que necesitaba en un partido para adultos. ¡Y qué partido! Retiró aburrido a Pirlo y dio pases para salir a hombros de ese estadio que un día Núñez comparó con una fábrica y que anoche fue la fábrica del gran sueño azulgrana. ¿Y Víctor Valdés? Vengan en procesión sus detractores a pedirle perdón. ¡Yo os perdono!. Gilardino y Shevchenko soñarán con él: los ha minimizado. Hemos sacado el billete para viajar a París en business class. ¿Podemos emprender el vuelo? Todavía no: nos falta sacar la tarjeta de embarque en el partido de vuelta que debe ser la gran y espectacular noche de final de temporada en el Camp Nou.

Positifo: que el Barça ha mantenido siempre una imagen de firmeza, convicción, madurez y de juego alegre ante un Milan con mucho cuerpo pero que ha ido menguando como equipo con el paso de los minutos.

Nejatifo: las declaraciones de Tachito en La Gazzetta dello Sport, no en todo su conjunto (comparto algunas cosas) sino cuando se da un autobombo inadmisible en un presidente del Barça y más propias de un petimetre cargado de vanidad y ambición.

¡Bona nit, bona sort i visca el Barça!

Veamos si somos los mejores

Nos pierde la vanidad: todavía no hemos ganado ningún título internacional pero ya somos los mejores del mundo. “¡Porque lo digo yo!”. Pasamos justitos ante el Chelsea y con un arbitraje de cámara en Stamford Bridge, hicimos lo propio con el Benfica (¡vaya penalti y tarjeta roja perdonados a Motta en La Luz!) para luego, venga a sufrir en el Camp Nou. Total, los amos del mundo. ¿El Milan? Ya dije que ante el Inter me pareció un bodrio, pero sigue presionando a la Juve. Tampoco es que nosotros hayamos dado gozo en los últimos partidos, más malos que la carne de pescuezo. Y, sin embargo, algunos comentarios me recuerdan las vísperas de la final de 1994. Voy a decirlo de otro modo: la Final de 1994, y la pongo con mayúsculas porque fue la final de una idea, de una época, casi de un sueño. Fue el despertar de golpe y porrazo a una dura realidad. ¡Con lo bien que lo había hecho el tandem Rexach-Cruyff hasta ese momento! ¡Qué modo tan patético de perder la brújula, de desmontarlo todo, de caer en barrena!. ¡El hundimiento!.
Soy el primero en admitir que este Milan no es el de Baresi, Rijkaard, Gullit y Van Basten y ni siquiera el inferior de Atenas'94 (¡es que nos ganaron con Massaro!). Pero, mientras nosotros empatábamos en casa con el Chelsea (si, ya sé que al final les regalaron un penalti superfluo), el Milan descoyuntaba al Bayern de Munich, uno de los favoritos. Y que mientras el Benfica nos cortaba la respiración, ellos cortaban el camino (con la suerte de cara, es verdad), a uno de los equipos que mejor juegan al fútbol hoy en Europa, el Lyon. Este mismo Milan, al que el año pasado dimos un baño de fútbol, nos relegó al segundo puesto del grupo. Ahora nos reímos de Gattuso como antes lo hacíamos de Desailly. Pulutant, una poca más de modestia y que no tengamos que escarmentar otra vez, que todavía no somos los amos del mundo aunque nos comportemos un poco como los nuevos ricos del fútbol.

Positifo: el apasionante final de temporada de la Premier League, con un Chelsea que está que se sale y un Manchester United ya repuesto del resbalón ante el Sunderland que apura sus opciones hasta el último minuto, como hacen los equipos con dignidad, como el propio Milan en Italia y el Hamburgo en Alemania.

Nejatifo: lo que leo en algunos comentarios de ayer en este mismo blog sobre un posible alquiler de Eto'o a un equipo árabe en plena competición. ¿Cómo se puede dar credibilidad a semejante disparate? ¿No creeis que un bulo tan carente de fundamento queda comentado por sí solo?

¡Bona nit, bona sort i Força Barça!

¡Vaya via crucis!

¡Cómo tarda en llegar ese Milan-Barça! A los dos equipos se les hace eterno, según me ha parecido apreciar en sus partidos de esta tarde, Milan-Inter y Barça-Villarreal. Cero patatero en fútbol. El Milan ha jugado al ralentí, con una lentitud exasperante, sin imaginación ni entusiasmo para romper el catenaccio del Inter, lo que sólo ha conseguido en una ocasión, a remate del defensa georgiano Kaladze, el que forma el eje central con Nesta. Parecía un partido de veteranos. Un bodrio...que al menos al Milan le permite presionar al Juventus y mantener esperanzas de alcanzar el scudetto, algo que parecía imposible semanas atrás. Pero el Milan, como no puede despreciar ningún punto, ha tenido que sacar el equipo al completo, con la baja de Inzaghi, que sí jugará contra el Barça en vez de Gilardino.
¿Y el Barça? Horroroso, repartiendo mucha leña ante un rival que también tiene Copa de Europa, perdiendo tiempo...Lo que menos me ha disgustado es la posibilidad de ver a la gashina Maxi, que ha marcado uno de esos goles que cuando los marca Tamudo todo el mundo dice que es un gol de pillo: ha robado la cartera a Peña pero, incomprensiblemente, el árbitro se lo ha anulado. Buen partido de Giuly, pésimo de Van Bommel y de Edmilson como central, desquiciado Deco (no entiendo que no haya sido expulsado) y goleador Eto'o aunque excesivamente egoista.
Y eso, ante un Villarreal sin su centro del campo al completo (Senna, Tacchinardi, Sorín), sin su goleador (Forlán) y con sólo tres jugadores en la alineación que fueron titulares ante el Inter (Peña, Arruabarrena y José Mari).

Positifo: que Márquez esté a punto para San Siro y podamos recomponer la defensa titular: Oleguer, Puyol, Márquez, Gio.

Nejatifo: la lesión de Larsson que unida a la de Messi reduce la capacidad de maniobra de Frank Rijkaard, que no tendrá más remedio que alinear en Milan a Giuly, Eto'o y Ronaldinho.

¡Bona sort, bon fi de setmana i Santes Pasqües!

Berlusconi, ¿árbol caído o fiera herida?

Que Silvio Berlusconi haya sido descabalgado de la presidencia del gobierno italiano, ¿es bueno o malo para el Barça? Il cavaliere pierde poder y ya sabemos lo sensible que es el mundo del fútbol al poder: basta comprobar que al Chelsea lo tratan como un apestado, tanto los árbitros como los del comité de disciplina de la UEFA, al no pertenecer al cartel del G-14. Si los árbitros y la UEFA consideran que el Milan es un árbol caído, empezarán a hacer leña de él y le costará levantar cabeza. ¿Para qué nos vamos a engañar? Al Real Madrid le ha sucedido algo de eso: era el equipo mimado, en España y Europa cuando vivía al socaire del poder del PP de Aznar pero, desde el 14-M (en ese momento si mal no recuerdo el Madrid era líder), su caída ha sido tan estrepitosa como la del partido político que le daba cobijo. Llegados a este punto, alguien se preguntará: ¿Qué insinúa este tío? Pues lo que digo: que Berlusconi puede tener su caída libre (en la que arrastraría al Milan) tras la jornada electoral del 9 y el 10-A. Pero también podemos hacer una lectura menos beneficiosa para el Barça: la fiera está herida. Herida en un orgullo que se resistirá y peleará a dentelladas para no sufrir dos derrotas en quince días.

Positifo: que en el Barça haya cinco italianos (Motta, Belletti, Messi, Maxi y Edmílson), lo que debería ser explotado más por nuestros medios de comunicación con vistas a ambientar el partido de San Siro. ¡A ver, esa imaginación, colegas!.

Nejatifo: la timidez de Riquelme ante un micrófono y en una sala de prensa (me remito al Telenotícies de hace un momento en TV3), que hace pasar un mal rato incluso al telespectador. Ese carácter apocado y casi autista, explica por qué un jugador de su nivel no proyecta una mejor imagen, por qué los grandes equipos no apuestan por él ni las multinacionales lo contratan para sus campañas publicitarias. Ojo: no es una crítica porque a uno no se le puede criticar por ser como es, auténtico y sin dobleces. Me limito a subrayar un hecho.

¡Bona nit i bona sort (també als pericos)!

La verdad nos hace libres

Los regímenes totalitarios tienen pánico a la verdad. Por eso la persiguen hasta obligarla a refugiarse en la clandestinidad, la reprimen y condenan para presentarla como algo subrepticio, impuro y deshonesto. Sólo les vale una verdad: la oficial, la suya, obligatoria e impuesta por el pensamiento único. Por eso los regímenes totalitarios se rodean de una guardia de corps de pensadores de pesebre, supuestos intelectuales (historiadores de pacotilla, catedráticos en decadencia, enchufados y arribistas con el libre puesto...) que vayan esparciendo por doquier ese pensamiento único pero, sobre todo, que sean policías represores de la verdad. A poder ser, con sutilezas como la difamación y el desprestigio.
Ahora se anuncia la aparición del libro de Sandro Rosell. Puede ser oportunista (como todos los que salen por Sant Jordi) o inoportuno (pues podía haber esperado a que el Barça fuera mal). Desde las posiciones oficialistas del actual régimen azulgrana, ya se anticipa que el libro contiene mentiras: ¿Cómo iba a pedir Laporta a Scolari? ¿Cómo que Rosell no quería echar a Rijkaard...? Vamos a ver lo que dice: sus tirantes relaciones con Cruyff, el fichaje de Ronaldinho, por qué se convirtió en un apestado en la junta al robarle popularidad a Laporta, la entrada de Echevarría en el club, el fichaje de Eto'o...
Personalmente tengo mucha más curiosidad por leer esos capítulos que los dedicados a explicar sus éxitos como ejecutivo de Myrurgia o Nike. Y, cuando lo haya leído (como hice con “Crònica del nuñisme”, del ínclito Jordi Badía aunque fuera lo más parecido a un libelo), seguramente podré decir que ya sé algo más del Barça y del autor. Pero, yo sí quiero saber. Y celebraría que el libro de Rosell fuera un éxito porque me ratificaría en la convicción de que, mientras una minoría de barcelonistas querría ver clausaradas emisoras, prohibidos programas de televisión, expulsados periodistas y quemados libros, seguimos siendo mayoría los que queremos saber.

Positifo: que el trajín electoral de Italia y la seria advertencia que sus compatriotas han dado a Berlusconi, pueda repercutir negativamente en el Milan. Advertencia que hago extensiva a los presidentes ambiciosos que buscan en el deporte un trampolín para su promoción personal aunque para ello un día tengan que quitarse los pantalones, tocar las maracas o bajar al pozo.

Nejatifo: que conseguir matematicamente el título de liga se haya convertido para algunos en una ansiedad, derivada de las inoportunas palabras de Laporta (“¡quiero la liga cuanto antes!”), pronunciadas la víspera de que el equipo jugara en Málaga (tres empates desde entonces), cuando lo que menos conviene al equipo en estos momentos es verse sometido a tales presiones.

¡Bon dia i bona sort!

Todo el pescado vendido

Desde la autoridad que me atribuyo por haber acertado la porra (Sardineiro, 2- Soy mineiro, 2), quiero manifestar que no me inquieta lo más mínimo que el Barça haya jugado en la cornisa cantábrica como hace quince días en Málaga. Boquerones o sardinas, todo es pescaso azul. Y, en lo tocante al Barça en la Liga, todo el pescado está vendido. Por eso podemos hacer pruebas como la de Rodri (espero que ahora no lo matemos, como a Lucendo) o darle al fin minutillos a Maxi. O dar descanso a nuestro O Rei Ronaldinho y a Ula, Ula, Ulagué, y que reserve fuerzas para firmar libros por Sant Jordi. Me tomo lo de Santander como me lo tengo que tomar: de cualquier manera menos en serio. Si llevándoles 11 puntos al Madrid y al Valencia ya a nadie parece importarle un pimiento esta Liga, ¿os imaginais si hubiéramos cantado el alirón? ¡Ya la tendríamos aburrida!.
Y no me vengais con que el Milan sí que se apretó los machos, Kaká dio un recital (y anotó un hat trick) y el equipo pulverizó al Chievo (4-1). Su caso y el nuestro no tiene nada que ver: ellos aún presionan para atrapar a una Juve, penosa ante la Fiore, 1-1 y gracias a que Abbiati paró un penalti.

Positifo: que el equipo femenino del Barça, al que la actual directiva dio un fuerte impulso al fichar a bombo y platillo a Marigol y al quitarle la figura al Espanyol, no haya descendido de categoría.

Nejatifa: la noticia aparecida ayer en el portal www.e-noticies.com según la cual "la junta directiva del FC Barcelona ha decidit presentar actes de conciliació contra dos dels tertulians habituals al programa Força Barça d’Alfons Arús a Td8".

¡Bona nit i bona sort!

Sube Marc, baja Ludo

Yo habría alineado a Giuly contra el Madrid (a lo mejor habríamos ganado) y contra el Benfica (a lo mejor no habríamos perdonado tanto allá ni sufrido tanto aquí). Ya sé que es muy fácil decirlo ahora pero tengo la osadía -soy de un natural osado- de decirlo siempre antes de que comiencen los partidos. La hago en La Graderia, de Ràdio Barcelona, donde tienen la gentileza de pedirme el punto de vista antes y después de los partidos del Barça. Pero ¿ya estoy desestabilizando? ¿ya me contradigo? ¿ya busco merder...? Porque fui el primero en decir que ojo con Iniesta, no vayamos a crear una estúpida y nociva polémica como la que montamos en su día -yo metido hasta las cejas en ello- entre Johan Cruyff y lo Pelat. Pues no: no quiero polémica ni con Iniesta ni con Giuly. Me limito a constatar que si el pequeño corso no ha entrado en el equipo ni con la baja de Messi, imaginaos lo que le espera en cuanto el pibe vuelva a la alineación, prevista para antes de diez días. Pero la plantilla de un equipo, en su aspecto más despiadado, es como una lonja de contratación: hoy subes, mañana bajas. Frankie y su staff creen en Larsson para quien augurábamos (me cuento entre los tales), un retorno al ostracismo, en cuanto Eto'o volviera de su campaña de las Pirámides. Pues va a ser que no y me alegro por el vikingo, a quien el miércoles el Camp Nou despidió de un modo que ponía la carne de gallina. ¿He dicho gallina? ¿gashina? Este ya no remonta el vuelo ni en la Catalunya Cup. Tampoco polemizaré por ello: ya dí mi punto de vista antes del Benfica y tampoco me habría parecido un crimen verlo salir tras el descanso a pelearse con Luizao. Me callo. Y, por el Principio de Arquímedes, si unos bajan, alguien subirá. En este caso Van Bommel. Puede ser nuestro nuevo Luis Enrique. Creedme: este percherón aún nos dará tardes de gloria. Lo comentaremos aquí.

Positifo: 1) que el buen partido de Eto'o, su asistencia y su gol ante el Benfica, ha acallado las voces de los nostálgicos adoradores de Ronaldo, obnubilados por su gol en el Camp Nou. 2) Los 219 comentarios de ayer y las 1.500 entradas o más (no lo he mirado), que demuestran que este espacio de debate barcelonista rinde un servicio. (¿Servicios? al fondo a la izquierda).

Nejatifo: el tufillo que desprenden las actuaciones de los Mossos d'Esquadra (la policía catalana) relacionadas con el Barça. Dos hechos confusos: el incidente en un bar frecuentado por radicales antilaportistas antes del Madrid-Barça (ni aclarado ni investigado) y la peculiar escolta al Benfica, denunciada a la UEFA por el club lisboeta. Admiro y me da mucho morbo la consellera Montse Tura y no me gustaría que, en lo tocante al Barça, alguien le estuviera colando goles.

¡Bona nit i bona sort!

¡Eto'o, t'estimo!

Todavía no estamos en Semana Santa y, faltando un cuarto de hora para el final del partido con el Benfica daba la impresión de que iniciábamos un Via Crucis, una subida al Calvario un camino de espinas. Suerte que Eto’o, en uno de los partidos mejor jugados que le recuerdo con la camiseta del Barça, nos ha dado agua del Carmen. ¡Qué golazo! ¡Y en qué momento más oportuno! Ha sido un Bakerazo: sufríamos como en Kaiserslautern. Allí, porque estábamos fuera; aquí porque no nos veíamos del todo dentro.
Y eso que el Barça, en mi opinión, ha jugado uno de los partidos más serios desde que se lesionó Xavi. Con el mérito añadido de que tampoco podía contar con Márquez, con Motta, con Messi y, casi, casi, con Edmílson. Me extrañó que no saliera Giuly pero lo cierto es que no recuerdo otro partido en que Larsson, Ronaldinho y Eto’o, permutaran posiciones de un modo tan constante, sacrificado e inteligente. Lo de Eto’o ha sido para levantarle un monumento.
Pero, aún con las bajas apuntadas, el equilibrio entre todas las líneas me ha parecido perfecto. Y eso que Deco…seguramente no le vendrá mal descansar en Milán. Sí, ya sé que me saldrá alguno diciendo que ¡coño, si sólo era el Benfica! Pero ¿cómo es creeis que se cepillaron al Manchester y al Liverpool? Pues más o menos jugando así: creando dos contragolpes de infarto sólo que metiendo dentro lo que Simao y Karagounis nos han perdonado. Claro que, en el segundo caso, no ha habido perdón sino paradón de Víctor Valdés.
Ya estamos en semifinales, justamente frente a otro de los candidatos, el Milan. Porque todos los demás (Chelsea, Madrid, Manchester, Liverpool y Juventus), se han quedado tirados en la cuneta. No podíamos imaginar un camino a París más despejado. Ni una final, ante el Villarreal o el Arsenal, más apetitosa.


Positifo: que, además de los jugadores de Frank Rijkaard, otros dos grandes triunfadores de esta Liga de Campeones tienen una nítida coloración azulgrana: Cesc Fàbregas y Juan Román Riquelme. Y otro, Thierry Henry, puede tenerla muy pronto.

Nejatifo: que el triunfo claro, merecido e indiscutible del Barça, haya tenido que producirse a expensas de Ronald Koeman, nuestro héroe de Wembley, uno de los mitos vivos del barcelonismo.


¡Bona nit, bon San Siro y bon Saint-Denis!

De San Siro a Saint-Denis

Ya sabemos que el próximo rival del Barça en la Liga de Campeones es el Milan. Y lo digo desde el máximo respeto al Benfica, desde la admiración que siento por Ronald Koeman y que doy por sentado que en el Camp Nou apurarán con brío sus últimas posibilidades. Pero no me cabe la menor duda que la clasificación sonreirá al Barça. Y luego, ese Milan tocado por la gracia, que ha dejado en la cuneta el jogo bonito del Lyon. Los franceses han fenecido de descaro, cuando han querido tomar San Siro por derecho de conquista, cuando se aprestaban ya a recibir el premio a su fútbol espectacular, abierto, lozano, jovial. Entonces el Milan le ha hecho al OL lo mismo que la Juve le hizo al Werder Bremen, ¿recordais?. Han entrado en tromba los Shevchenko, Inzaghi y Kaká, mientras atrás aguantaban los Maldini, Gatusso y Costacurta: equipo de dos caras, en el que conviven Mr. Hyde y el Dr. Jeckyll. Con ese monstruo futbolístico deberá pelear el Barça el derecho a tomarse un pastís en el Café de Flore, una chucrute en la Maison d'Alsace y festejarlo por la noche con una farra en Pigalle.
Pero la gloria de esta noche corresponde al Villarreal. De submarino, nada: acorazado a toda máquina. Ya dije en su día, pero no me importa repetir las buenas ideas, dada su escasez, que en el Villarreal hay más campeones del mundo que en cualquier otro de los clasificados. Con Libertadores e Intercontinentales a porrillo, ¿cómo no concederles el don de la competitividad a Riquelme, Arruabarrena o Sorín? ¿Le vieron la cara? ¿Le vieron la ceja y el ceño...? Todo cuanto sucedió anoche en El Madrigal fue histórico, hermoso, ejemplar. Este equipo todavía no ha marcado su límite europeo. Otro que enfila el camino de París como epílogo a una marcha triunfal.

Positifo: 1) que Edmílson se haya reincorporado a la convocatoria del Barça ante el crucial partido de esta noche. 2) el clima de buen rollo que existe entre dos equipos unidos por la historia pero enfrentados deportivamente por ella.

Nejatifo: que se haya frustrado un Olympique Lyon-Barça, que habría marcado un hito en la historia de ambos clubs, sobre todo del francés, que tiene su referente y modelo en el equipo y el juego barcelonista.

¡Bona nit, bona sort i Visca el Villarreal!

¡Que sí, que si, que ja som a París!

Deco, el único jugador de la plantilla del Barça que ya ha ganado la Copa de Europa, además de ser un buen conocedor del Benfica como portugués de adopción, asegura que el Barça debe tener paciencia en el partido de mañana. Es un reconocimiento implícito de que el equipo acusa una cierta ansiedad por su falta puntería en los últimos partidos. Y nada hay mejor para combatir la ansiedad y evitar que se convierta en una obsesión que tener un poco de paciencia y de serenidad. Es decir: jugar sin precipitaciones, nada de volcarse a tontas y a locas sobre la portería de Marcello Moretto que, por suerte para nosotros, no es Iker Casillas. Pero esa misma actitud hay que pedirle al público, que es capaz de gritar “¡Campeones, campeones!” cuando las cosas (y el marcador) van de cara pero se encierra en un silencio gélido si no ve un resultado tranquilizante. Esa es una de las características psicológicas del barcelonismo, un rasgo histórico: rara vez la grada empuja al equipo sino que espera a que la situación se produzca a la inversa. Lástima que el partido ante el Madrid fuera tan light que ni siquiera sirvió de ensayo para recibir al Benfica como debe ser: sin miedo y con ganas de tirar del equipo como en las ya históricas “nits màgiques” del Camp Nou...Pero, como nadie nos va a cambiar, del silencio sepulcral con el 0-0, pasaremos al “¡Que sí, que sí, que ja som a París” (grito en nuestra lengua que, por cierto, brindo a falta de otro más original).

Positifo: la tarde que nos espera hoy, y que puede dejar a Milan sin fútbol europeo. Como no pienso perderme ni el partido del Villarreal ni el del Lyon, acabaré mirando como Fernando Trueba. ¡De cine, tíos!

Nejatifo: que Roberto Carlos haya denunciado esta noche en el Maracaná 06 que “le dedicaron insultos racistas” en el Camp Nou, cuando nadie los oyó ni el árbitro los reflejó en el acta (que haya trascendido, al menos).

¡Bona nit i bona sort!

Cuenten con 'la gashina'

Las lesiones permitieron acorazarnos el año pasado en una alineación forzosa que jugaba de memoria: todos sabían cual era su papel y, además de Ronaldinho, Eto'o y Deco, los componentes del bloque, uno por uno, realizaron una gran temporada. Eran once más Iniesta y Sylvinho, y sabíamos que, a partir de determinado momento, Iniesta entraría por Giuly, Deco pasaría a la banda derecha y el de Fuentealbilla compartiría con Xavi la dirección del juego. Eran los mejores momentos de cada partido, aquellos en los que el Barça pasaba a gustar y gustarse, a poner las guindas encima del pastel. Este año lo llevábamos incluso mejor hasta la lesión de Xavi. Hasta ese momento, funcionaba todo, incluído Van Bommel, y habíamos mejorado el sistema defensivo -nadie discutía la pareja Puyol-Márquez- y Edmílson iba tomando aplomo también en el engranaje. Encima, habíamos sacado la grossa de Nadal con la explosión de Messi, por lo que teníamos un equipo indiscutido e indiscutible. Ahora, en cambio, las alineaciones se discuten...por primera vez en dos temporadas. Es verdad que Rijkaard se ha encontrado con cuatro bajas (Xavi, Márquez, Edmílson y Messi), que con la de Motta ascienden a cinco. Gravísimo problema para cualquier entrenador, y más en vísperas de un partido crucial, como el de este miércoles. Y, justo en estas circunstancias (o tal vez como consecuencia de ellas), se nos gripa el ataque. ¿Qué hacer? De entrada, redoblar la confianza en Van Bommel, que está demostrando una gran llegada desde la segunda línea (a él le hicieron el penalti ¿no?), tan poco eficaz esta temporada; y meter sin pestañear a Giuly de titular. Y, tercero: ¡darle una oportunidad a la gashina Maxi! Si ante el Benfica necesitamos un segundo gol que nos tranquilice, quiero ver a la gashina haciendo ejercicios en la banda desde el minuto uno del segundo tiempo y os reto a comprobar si el Camp Nou no estalla de confianza y apoyo. El año pasado casi nos mete en cuartos de final de la Liga de Campeones y ahora, después de tres partidos con un solo gol y de penalti, no estamos en condiciones de desaprovechar todas nuestras bazas.

Positifo: el repaso que el modesto Getafe de Bernd Schuster ha dado al Osasuna en su propio estadio. Bernardo, que el año pasado fue insensatamente despedido del Levante cuando aún podía salvarlo, ha demostrado ya que es otro grandísimo entrenador de la prestigiosa escuela del Camp Nou.

Nejatifo: que tanto el clásico Barça-Madrid, como el derbi andaluz Betis-Sevilla, hayan registrado los dos peores arbitrajes de esta jornada, con errores garrafales que alteraron el resultado. No me opongo a que los árbitros reivindiquen sus derechos pero tampoco estaría mal que fueran menos negligentes en el campo.

¡Bona nit i bona sort!

Estamos en un bache

Tercer partido consecutivo sin ganar. Tercer partido consecutivo sin marcar ningún gol de jugada. Primer gol en tres partidos, de penalti inventado. La situación no es preocupante...para Ronald Koeman. Porque lo que no deja de ser un buen resultado ante el Madrid (la liga ya estaba sentenciada antes de este encuentro) sería un resultado mortal ante el Benfica. Tercer partido consecutivo con Andresín Iniesta llevando la manija, haciendo un partidazo...Tercer partido consecutivo que si en vez de Eto'o nuestro delantero centro se llamara Kluivert, estaríamos pidiendo su cabeza. Tercer partido consecutivo con Rijkaard sacando una alineación equivocada. Motta (fuera de combate pero no passa res con la preparación física, los médicos ya lo habían previsto), ha estado en el campo el tiempo suficiente como para que Ronaldo le robara la cartera. Porque él se lesiona pero el rollizo Ronaldo ya se le había escapado en esa jugada, como en otra en la que Iniesta le ha hecho falta no pitada (¡gran Gaspart poniéndonos un árbitro de cámara!). La dupla Eto'o-Larsson no funcionó. Debió jugar de salida Giuly, lo mismo que debería jugar el miércoles contra el Benfica. Pero, he ahí otra de las barbaridades perpetradas esta noche por Frankie: ¡lo mete por Van Bommel, quien estaba dando más trabajo a Casillas!. Hasta el propio entrenador azulgrana, en la rueda de prensa, ha reconocido que el Madrid, al jugar con diez, se ha echado más atrás, dificultando las acciones de ataque del Barça. ¡Pues elimina a Larsson o Eto'o y reduces la aglomeración! Lejos de hacer eso, Ronaldinho se ha metido también en el centro del ataque...En fin, de bojos.

Nejatifo: la indiferencia de Tachito ante la falta de civismo de algunos hinchas que dan tan mala imagen del Barça y de lo que representa, como los que recibieron a escupitajos a Mourinho, los que ayer apedrearon el autocar del Madrid, el espontáneo que saltó al campo o los que lanzaron una bengala.

Positifo: el excelente partido que el Benfica ha realizado en el campo de Os Belenenses (1-2), con goles de Miccoli y Karagounis, pero con lesión de Nuno Gomes apenas comenzado el partido. El pichichi del equipo portugués ya se perdió el partido de Lisboa por sanción y es muy probable que se pierda el del Camp Nou por esta lesión. Tal vez por eso Koeman probó ayer todas sus bazas atacantes y dio minutos a Manduca y Mantorras.

¡Bona nit i bona sort!

Orgullo y perjuicio

El Madrid va a sacar en el Camp Nou todo su orgullo, dicen quienes creen entender la mentalidad del equipo madridista, convencidos de que no va a luchar ante el Barça por tres puntos que tampoco le darán el título -aunque le permitirían soñar vagamente con esa quimera- sino por reivindicarse. Cualquiera que se enfrente hoy en día al Barça de Ronaldinho se pone ipso facto en los focos de la atención mundial. Uno crece o disminuye en función de la categoría de sus adversarios y el Madrid necesita acudir al estadio azulgrana pues por el mero hecho de ser el rival del Barça ya va gozar de una cuota mediática que ha perdido en una temporada nefasta. El Madrid no sólo está herido en su orgullo: está herido de muerte como equipo, como sistema, como colectivo. Es un proyecto fallido, el galáctico, no por malo como idea (ahora el Barça lo ha copiado) sino porque se le pasó la fecha de caducidad. Hace unas semanas invocaban el espíritu de Juanito y pusieron en circulación el chiste macabro de que eso les convirtió en once juanitos, ánimas del purgatorio que al Camp Nou vienen cual Santa Compaña a penar sus muchos errores.
Pero si el Madrid va a echar mano a la desesperado de su orgullo, el Barça debe prevenirse del perjuicio que se derivaría de una derrota. Cosquillas de un tábano a un purasangre. Pero conviene no encadenar tres pinchazos consecutivos aunque la infinita aura de bondad que rodea al club sepa disculparlos con zalameros argumentos. La realidad es que en dos salidas (Málaga y Lisboa), cero goles a favor y cero en contra. Resultados, dicho sea con todos los respetos, más propios del Depor de Arsenio que del Superbarça de Rijkaard. Otro pinchazo y hasta el Benfica nos perdería el respeto que nos tuvo durante el primer tiempo en Lisboa. Pulutant, tampoco para el Barça lo más importante son los puntos. Si para el Madrid lo primero es recuperar el orgullo, para el Barça lo último sería sufrir un nuevo perjuicio.

Positifo: que los árbitros hayan cobrado. Siempre sospeché que lo suyo, como el oficio más viejo del mundo, sólo podía hacerse por dinero. Al menos ahora ya no me cabe ninguna duda.

Nejatifo: que el Barça haya hecho otro fichaje para el departamente de protocolo, engrosando la nómica de todo lo que se refiere a comunicación y relaciones públicas con una veintena de empleados, sin contar con los del Canal Barça y no se sabe si los de la web del club, dado el oscurantismo que rodea a un departamente cuya misión debería ser la de informar. Mucho debía valer (y doy fe de que vale) Ricard Maxenchs, cuando son necesarias tantas incorporaciones para tratar de hacer su trabajo tan bien como él lo hacía.

¡Bona nit i bona sort!