Contaminación programada

El tema es Laporta, la escenificación de su entrevista, el grado de credibilidad que transmite, la ilusión que desprende…¡Objetivo alcanzado! El gran problema del Barça es que la decrepitud del careto presidencial, su mohín de abatimiento, el gesto contrito, el mensaje victimista…A mi me preocupa más ver que Garay, tampoco; que no va a venir ningún fichaje de relumbrón porque Txiki no sabe hacerlos y, para muestra, Henry; y prefiero pensar eso antes que creer que el Barça ha dejado de ser un equipo atractivo para los jugadores cotizados; que ya no es cierto aquello de "tothom vol venir al Barça"; la volitización de una plantilla ganadora que ha desaparecido como si fuera el portátil de Laporta; la convicción de que no vamos a seguir el tirón de los grandes, no sólo en Europa sino en la propia liga española; la inseguridad que me transmite un entrenador de tercera, atiborrado de teoría pero con nula experiencia…Eso, por ceñirme sólo a los temas estrictamente futbolísticos, no entrar en los sociales y patrimoniales. Porque creo que todo eso es lo más urgente, aunque la salida histriónica del presidente y la consiguiente polución informativa que ha provocado –el medio es el mensaje- haya parado el primer golpe, de los muchos que vamos a recibir.

Positifo: que una vez liquidado Frank Rijkaard en el papel de chivo expiatorio y único, y dado el carácter intocable que tiene Guardiola al estar avalado por quien lo está, por fin Txiki Begiristain se ha quedado sin cobertura inmediata y tendrá que aguantar la vela, como cualquier otro palo.

Nejatifo: que Karim Benzema, el pichichi del fútbol francés, gran figura emergente y único jugador al que el secretario técnico del Barça ha ido ver jugar en directo, tampoco vendrá, y, si no yerro, es el cuarto que se nos escapa esta temporada.

¡Bon dia, bona sort i bon viatge a Ítaca!