Para quienes el fútbol inglés nos tiene el corazón robado, hoy es un día grande: los cuatro equipos de la Premier presentes en la Champions y los tres que disputan la Copa de la UEFA, lideran sus grupos. Por algo será, aunque en el caso del Arsenal he sentido vergüenza ajena al comtemplar el atentado al fair play que han perpetrado los gunners en complicidad con el Oporto. Con la derrota del CSKA en Hamburgo, igualmente habrían pasado ambos pero un poco de vergüenza les habría impedido estafar a la audiencia de un modo tan ruín.
Del Liverpool no voy a decir nada, porque después de haber puesto por las nubes al Werder Bremen y recibir a cambio una lluvia de tomates virtuales, mejor me callo. Ya hablaremos el día 15, después del sorteo, si nos toca. ¿Y el Manchester United? Dejadme que aunque sea con la boca pequeña os diga que es una máquina de hacer fútbol de ataque, de luchar, de compromiso con una camiseta. De convicción, de seguridad, de confianza. Casi lloro cada vez que veo a Wayne Rooney o a ese cada día más joven Ryan Giggs, autor de un gol que me ha recordado la palomita de Marcos (preguntad a vuestros mayores). Del Chelsea también mejor me callo: hablaremos del equipo de Mourinho si le toca al Madrid, el deseo morboso de un sector del barcelonismo.
¿Os gustaría que nos tocara para octavos de final el Arsenal, el ManU o el Liverpool? Pensad que la vuelta será en su casa. Veo accesible al primero, que está fatal, y misión imposible con los otros dos. Me pido al tramposo Milan, en un annus horribilis, que hoy ha vuelto hacerle por segunda vez la misma jugarreta a Serra Ferrer: la de aquel año que nos dejaron fuera con un empate que ni les iba ni les venía con el Leeds (y Shevchenko fallando un penalti), hoy la han repetido al perder encasa con el Lille y condenar al AEK del mallorquín.
Tampoco me disgustaría el Bayern de Munich pues si hemos sido capaces de superar al primer equipo de Alemania, el tercero sería para nosotros pan comido. Aunque, en realidad, ¿qué equipo no debe ser pan comido para nosotros, mientras tengamos de nuestra parte la suerte de los campeones?
Positifo: La recuperación de Ronaldo (tres goles en dos partidos incompletos), una buena noticia para los amantes del fútbol y mala para el Real Madrid y Fabio Capello, que pronto deberá aceptar que no puede ignorar al clan brasileño para favorecer al frente nacional.
Nejatifo: el penoso estado del fútbol vasco, sin que encuentre yo razones que puedan explicarlo. Al desconcierto del Athletic se une la bochornosa situación del Alavés abandonado a manos de Dimitri Piterman por la sociedad vitoriana, que ahora se hace la ofendida. Faltaba el numerito de la modélica Real Sociedad, donde hoy han ido a tortazos dos jugadores (Juanito y Rosato), el segundo de los cuales ha tenido que ser intervenido de fractura en un maxilar. Bonitos ejemplos para la juventud del país...
¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!
El imperio (inglés) contraataca
jueves, 7 de diciembre de 2006 | Publicado por Enric Bañeres en 12:47 a. m.
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