La liga de los estrellados

¡Vaya mazazo para el fútbol español! ¡Vaya ducha fría de realismo! La liga de las estrellas, la que presenta más candidatos a los Balones de Oro, a los FIFA World Player, la que tiene más "glamour" y que acapara futbolistas mediáticos para que hagan girar la rueda de la fortuna deportiva y económica, a la calle. Alguien atribuirá a la mala suerte lo sucedido al Barça y al Madrid en las últimas veinticuatro horas. No faltarán los puristas que tanto mejoroban criticando más a los contrarios -Chelsea y Juventus, es decir, Mourinho y Capello- por su propuesta de fútbol "resultadista".
Sin embargo, lo de estos octavos de final de la Copa de Europa, este desastre mayúsculo, se podía intuir. En la primera fase de la Liga de Campeones, el Deportivo de La Coruña marcó el hito histórico de no conseguir ni un solo gol en seis partidos; el campeón español, el Valencia, fue despedido por la puerta de servicio hacia la Copa de la UEFA, donde cayó a la primera; el Barça, a doble partido, ya habría sido eliminado por el Milan...y el Madrid sobrevivió sin demasiados méritos al Dinamo de Kiev, al Bayer Leverkusen y halló su salvación en un Estadio Olímpico a puerta cerrada y ante los suplentes de la Roma, obligados a disputar un partido que para ellos no tenía más sentido que el de la humillación. Esos son los antecedentes de lo que nos ha llevado a no contar con ningún representante en los cuartos de final de la Liga de Campeones. Somos menos que Francia, que Holanda, posiblemente que Portugal. Somos la Liga de los estrellados.