Una semana sin fútbol de verdad me provoca una profunda crisis de creatividad: queridos amigos, estoy seco. ¡Ni una misertable idea original en 72 horas!. Ya sé que se lo pongo a huevo a más de uno para que diga: “...ni en 62 años, mestre”. De acuerdo, dígalo o calle para siempre. Gracias amigos, ¡echad sal sobre mis cicatrices!. No culpo a quienes me llaman “abuelo cebolleta”: lo merezco por haberme hecho mayor. Y felicito a quienes habeis tenido la ocurrencia de no cometer aún este despropósito. Ahí tenemos el lamentable ejemplo de Luis Aragonés, que se resiste a tomar la jubilación, que confiesa sentirse con fuerzas...¿para qué? ¿para seguir perpetrando barbaridades? ¿Para tener uno de los mejores elencos de futbolistas españoles en toda la historia y devaluarlos hasta que parezcan destripaterrones? A mi, que España gane o pierda, me debería dejar sin cuidado, ¿para qué nos vamos a engañar? Pero, ya que me obligan a sentirme representado por ese equipo, exijo seriedad, nivel y responsabilidades. En plural: para el inepto Villar y el incapaz Aragonés. El fútbol español no está sólo por encima del de Islandia y Liechtenstein, como lo demuestran los equipos de club y las selecciones inferiores. Pulután, pido cabezas y la intervención decidida de la más altra magistratura del país (no me refiero al rey, no vayamos a empeorar aún más las cosas). Ya sé que para otros hay temas más importantes que el fútbol en la vida. Para mí, no. En consecuencia, en el buen nombre de todos los yayos de este país, y puesto que Villar no será tan acémila de quitarse voluntariamente el airbaig que le protege del siniestro total, pido que el mismísimo Zapatero se encargue de echar al Zapatones.
Positifo: 1) que vuelve el fútbol esta noche con el River-Boca, una oportunidad de ver un partido clásico y formarnos opinión sobre Gago y Palacio, a quienes quieren meter en el Barça como sea. 2) La grandísima impresión que me produjo el sueco Johan Elmander (25 años), desconocido porque juega en el Toulouse, en la parte baja de la liga francesa, sin proyección internacional. Otro fenómeno es Kim Kallstrom (26), pero a este ya lo descubrió el Olympique Lyon.
Nejatifo: la falta de transparencia, una vez más, en los movimientos de autopromoción y de giras institucionales del presidente Laporta, la oscuridad de ese acuerdo para financiar a un club argentino de tercer rango, la cada vez más frívola administración del dinero del zozi, mientras otros estás dedicando al club los mejores años de su vidorra.
¡Continuem remant amb força cap a Ítaca!
¡Zapatero, echa al Zapatones!
domingo, 8 de octubre de 2006 | Publicado por Enric Bañeres en 6:47 p. m.
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