Decía ayer Pau Gasol que los Menphis estarán un poco mosqueados con su lesión: “Ya no les hacía mucha gracia que viniera a este Mundial conque imagínate ahora...”. Es posible, como opinaba esta mañana Jordi Basté en la tertulia de RAC1, que el equipo de Pau cierre el grifo en los próximos eventos de la selección española, pues para ellos es mucho más importante el campeonato de la NBA que todo lo demás. Y, pregunto, ¿tan distintos somos de los americanos? A mi, y a muchos barcelonistas, nos la repamfinfla lo que puedan hacer Ronaldinho, Zambrotta o Deco con sus respectivas selecciones, y nos coge un subidón de mala uva si encima vuelven lesionados de gravedad tras jugar un partido con Kazajstan o las Islas Feroe, dicho sea con todo respeto. Y puesto que ni la FIFA ni la UEFA son conscientes de que no se deben meter en la misma competición, de igual a igual, a todos los paises del continente, yo al menos contra estos desheredados de la fortuna futbolística convocaría a futbolistas de clubs que ni van a competiciones europeas ni juegan más que Liga y Copa. Y eso lo aplicaría a todos las selecciones de las grandes ligas (Inglaterra, Alemania, Italia, España, Francia, Portugal y Holanda). Ante Liechtentein y similares, yo habría hecho un equipo a base de jugadores del Getafe, el Levante, el Racing, etcétera, etcétera. Para todos ellos la selección sería una especie de Operación triunfo, la mano del seleccionador debería tener alguna influencia en el juego del equipo y el gol número mil, al que le están dando tanto bombo, supongo que a la espera de que lo marque Raúl, lo podrían anotar Cheli, del Recre, o Rafita, del Mallorca.
Positifo: que las selecciones de países pequeños en el panorama futbolístico, son las únicas que realmente dan sentido a jornadas europeas como la de este fin de semana o el miércoles. Y ver que jugadores como Gudjohnsen pueden llenar de felicidad y orgullo a su pequeño país, o que mi admirado Jiri Litmanen (dos goles), lleva la ilusión a Finlandia, me reconcilia con el fútbol de selecciones.
Nejatifo: que la propuesta Dunga como seleccionador del Brasil va a dar la primacia al músculo, la dureza y la velocidad por encima de la floritura. O jogo bonito tuvo su gran oportunidad en Alemania y la perdió. Dunga, que como futbolista fue un obrero cualificado, va a exigir a estrellas como Ronaldinho algo más que elásticas, espaldinhas, rabonas y pechinhos.
¡Bon dia, bona sort i Visca el Barça!
El gol número 1.000
lunes, 4 de septiembre de 2006 | Publicado por Enric Bañeres en 1:33 p. m.
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