También podría haber titulado "De San Denis a San Mamés". Ya se sabe cuánto apego tenemos los periodistas deportivos a los juegos de palabras que maquillen nuestro déficit cultural. Estos días leo artículos que me harían sentir vergüenza propia si no fueran de otros. Por suerte, no los he escrito yo aunque, al no estar libre de culpa, me cuidaré mucho de lanzar la primera piedra. Porque bastaría con husmear en las hemerotecas para hacerme saltar los colores.
Digo que de la rua un poco coñazo del otro día a la ría de Nervión, por donde hace años no surca ya la gabarra en la que los leones cantaban sus alirones (¿rima consontante, pregunto a los gramáticos?). Y el partido ha sido interesante por diversas razones. La primera, porque al fin Eto'o se ha investido como pichichi en solitario, aunque a mí ya me estaba bien con el trofeo compartido con David Villa, uno de los héroes sin premio de la temporada. La segunda, comprobar que los médicos del club ignoran el modo de combatir las resacas. Porque, para mi, que Motta, Oleguer, Giuly y Belletti, saltaron a la Catedral con un colocón de aquí te espero.
Ítem más, me pareció que Eusebio ya ejerce de segundo de abordo, cosa que celebro pues -y así lo dije ayer tanto en Can Arús como en La Graderia de Ràdio Barcelona- para mi es un candidato más idóneo que Neeskens y Bruins-Slot. Y también me alegró ver que no debo rectificar mi opinión de que el Athletic es un equipo zafio, sostenido de forma artificial en Primera a costa del Cádiz y el Alavés, dos modestos que podrían dar lecciones de fútbol a los pelotaris de Clemente.
Y el partido me ha liberado del ya incipiente mono de fútbol. ¡Un sábado sin Premier League, sin Bundesliga, sin un mal partido italiano que echarse al coleto! En cuanto ha terminado lo de Bilbao, he hecho zapping hasta pararme en el Canal Cuatro, que emite ahora “El nombre de la rosa”. Acaba de salir aquel fraile majara gritando “¡Penitenciate, penitenciate!”. Ese palma, seguro.
Positifo: que Maxi López, pese al resultado de San Mamés, a mí me ha demostrado cosas que le convierten en un jugador interesante, alternativo, y hasta me ha parecido que Eto'o se encuentra tan cómodo y se aviene tanto con él como con Larsson.
Nejatifo: que desde que Sandro Rosell ha dejado de fichar, no conseguimos traer aquellas figuras que pretendíamos. Se rompe así el discurso retórico y pretencioso de que “todos los grandes jugadores quieren venir al Barça y no como antes" (se ve que no venían Cruyff, Maradona, Romário ni Ronaldo). Trezeguet fue el primero que decidió quedarse en la Juve y Laporta tampoco ha logrado seducir a Henry. Ya sé que ellos se lo pierden. Les pasa como a Jesucristo, que pudiendo nacer en Bilbao, eligió otro sitio.
¡Bona nit, bona sort i Visca el Barça...fins dilluns!
De la rua a la ría
sábado, 20 de mayo de 2006 | Publicado por Enric Bañeres en 11:37 p. m.
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