Amores que matan a Laporta

Laportistas del mundo, uníos. Uníos, porque os quedan cuatro telediarios. Pero, al menos, tomad ejemplo de los anteriores presidentes: iros con dignidad y sin manchar más el nombre del Barça. No busqueis más triquiñuelas. ¿Cómo puede alegar falta de motivos en la moción, quien promovió otra porque Núñez iba a convertir el Barça en Sociedad Anónima, porque insinuaba que se había metido en el bolsillo con Anderson y, entre otras sospechas e insinuaciones, porque votaban los muertos? Dejad que voten los vivos, hombre, no pongais más trabas. Teneis tan poca cultura democrática que estais tratando de confundir al personal en un patético intento de "censurar al censor". ¿De verdad creeis que le importa a alguien, más que a vosotros, quién hay detrás de la moción? ¿Todavía no sabeis que no es una acción a favor de nadie sino contra alguien? ¿Creeis que los casi 10.00 zozis que dieron su firma lo hicieron atraidos por el carisma de los promotores, perfectos desconocidos? Es humano que muchos de vosotros defendais el chanchullo, porque sois laportistas de pesebre, por interés, por agradecimiento estomacal. Pero, por favor, buscaros mejores argumentos porque, aunque no os importe dañar al Barça, hacedlo por el propio Laporta: no le hagais más daño pues ¡cuán cierto es que hay amores que matan!

Positifo: que Manolo el del bombo dona su instrumento a un museo, de modo que a partir de ahora las alegres melodías con que acompañaba el juego siempre vistoso y aguerrido de la roja, algo que lamentarán los otorrinos pero agradecerán los oídos internos, medios y delanteros de la afición hispana.

Nejatifo: que dentro de las maniobras de dilación de la moción de censura, quienes dicen querer agilizarla recurran a peritos calígrafos, con lo que va a ser más peregrina la comprobación de las firmas que la recogida misma. Unos obstáculos que confirman la parcial elección del presidente de la mesa y la voluntad obstruccionista de los representantes de la junta, ellos mismos objeto de la censura como el resto de los directivos.

¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!