Gran victoria...de la democracia

Menos en San Mamés, un público que se ha retratado delante de todo el mundo civilizado, la democracia ha tenido un respaldo nítido, claro y sin dobleces en todos los campos de la Liga. La democracia ha ganado hoy los tres puntos en todos los campos, con esa excepción lastimosa de La Catedral.
Y, a otra cosa. ¡Qué baño le han dado al Barça! Ni perdonándole la roja a Eto’o (y no sé si también a Zambrotta), ni anulándole al submarino amarillo el tercer gol se pueden hallar paliativos. Ya no le salvan ni los goles de Xavi, porque esa es otra: vergonzoso que los tres últimos goles marcados en el Camp Nou los haya anotado el fenómeno de Terrassa. Su trabajo no debería ser -aunque también- marcar goles sino marcar el ritmo, dar balones adelante, llevar la dirección del juego, superar al contrario en la llamada zona ancha. Pero, ¿cómo? ¿cómo teniendo al lado a un Iniesta genial, pero también a un Touré renqueante? ¿Cómo frente a cinco jugadores del Villarreal, todos internacionales menos los jóvenes Cazorla y Eguren? ¿cómo ante fenómenos (Senna, Pires, Matigol), que la tocan tan bien como los nuestros? El partido estaba perdido desde la pizarra. Jugamos como un grande sin serlo. Y estaba entregado con la nulidad insultante de Ronaldinho y Henry.

Positifo: el anuncio de cervezas Damm con Thierry Henry al que le preguntan si ha venido a Barcelona por los langostinos, el sol, la siesta, la posibilidad de jugar al lado de R10, por tener una casita junto al mar…Sólo me falta una pregunta: “¿O potser has vingut a fotre l’última atracament”? (*)

Nejatifo: que en dos partidos hemos resucitado a un penoso Madrid, hazmerreir en Europa pero que por nuestro entreguismo volverá a proclamarse rey de España. Osia: el tuerto en el país de los ciegos.

(*) “¿O quizá has venido a pegar el último atraco)

¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!