Moderadamente confiados

Ver que el Madrid juega mal pero aún así no hay modo de reducir la ventaja que nos lleva, puede conducirnos a la desmoralización. Soy partidiario de mirar la clasificación cuando te favorece pero tratar de ignorarla cuando te es contraria. Yo, cuando mi equipo va bien, la pongo en un marco y la venero como a las mejores jugadas de los cracks: es lo que tenemos de bueno los resultadistas. Pero el Madrid tiene también puntos vulnerables: juega con diez por real decreto (me refiero a la obligada presencia de Raúl como titular); echa mano de una esfinge (Guti) cuando las cosas se ponen feas; van locos por devolver al banquillo a Diarra, Baptista y Robinho, tres de los jugadores sobre los que en cualquier otro club se basaría el equipo; y tienen pánico a que se constipe Casillas y lo demuestra al ser el primer equipo que sienta en el banquillo a dos porteros suplentes, como hizo ayer en el campo del Levante. Pero todo eso no bastaría para fundar una leve esperanza si nuestro equipo no tuviera la determinación de dar caza al líder, ponerle presión, hacerle sentir la angustia del acoso. La próxima vuelta de Messi, la recuperación providencial y en el momento oportuno de Henry y la eficacia probada de Eto'o, nos debe permitir afrontar lo más duro y decisivo de la temporada con un triplete demoledor: Messi, Eto'o, Henry. Si yo fuera ellos, estaría acojonado perdido.

Positifo: que Ronaldinho empieza a entrenarse pese a lo cual no ha conseguido quitar protagonismo a Henry en las portadas de nuestros diarios deportivos, algo inédito e insólito.

Nejatifo: el hecho de que Racing y Athletic de Bilbao tuvieron que cambiar el portero en sus partidos de esta jornada; el Madrid sentó a dos porteros suplentes en el banquillo y el Espanyol tuvo que jugar sin el portero titular, demuestra la importancia de no perder más tiempo en la contratación del sustituto para el lesionado Jorquera.

¡Bon dia, bona sort i bon viatge a Ítaca!