Mejorando lo presente

Defensa a la italiana –pero adelantada y presionante- y ritmo a la inglesa –pero sin rifar el balón arbitrariamente. ¿Qué más puedo pedirle a mi equipo? Goles, sí, algún golito que nos diera ya el pasaporte anticipado a las semifinales. Porque los barcelonistas somos así: queremos y esperamos ver un gran partido de vuelta en el Camp Nou…pero nos gustaría más afrontarlo con un saldo de 0-3. ¿Y, por qué somos así? Lo diré muy brevemente: porque nos llenamos la boca hablando de espectáculo, estilo irrenunciable y collonadas semejantes y lo que a la hora de la verdad nos cabrea como monas es que nuestro equipo no vuelva con un par o tres de goles en el zurrón. Pero a mi, que me considero cofrade mayor de los resultadistas críticos, dadme un Barça que transmita las buenas sensaciones que me ha dado esta noche en El Madrigal y no tengo la más mínima preocupación por: a) el partido de San Mamés y, b) la eliminatoria de Copa.

Positifo: las sorpresas, como la derrota de Marruecos ante Guinea, que animan la Copa de África y corroboran que el progreso del fútbol en el continente es general y no está focalizado en tres o cuatro países (ojo, Camerún entre ellos) que se lo tienen muy creído.

Nejatifo: que, con los pozos de petróleo que tiene Irán, parece mentira como no son capaces de seducir a un seleccionador de los considerados “con cara y ojos”.

¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!