¡Ánimo, Frank, eres el mejor!

Si no haber ganado una liga puede que sea bueno, no ganar dos seguidas debe ser la rehostia…Esa es la única explicación que se me ocurre para que Frank Rijkaard mantenga el tipo pese a lo que le está cayendo por todas partes. Y, naturalmente, el míster no hace sino de paraguas. Paraguas de una directiva que le ha dejado con el culo al aire, que le señala como responsable del mal juego y los decepcionantes resultados, y, sobre todo, paraguas de un secretario técnico que no le ha sacado de la plantilla los elementos perniciosos, que fue el que peor pescó en el desguace de la Juventus (Zambrotta y Thuram no mejoran a Belletti y Oleguer), y que ha hecho con Thierry Henry y el Arsenal la repetición de la jugada -ojalá me equivoque- del ínclito Gaspart con el fichaje de Overmars y Petit. Un secretario técnico, en definitiva, que no es sino un títere en manos de quien lo maneja desde la sombra, el consejero áulico y gurú del mismísimo presidente. Sé que el aplauso fácil, en estos momentos de linchamiento colectivo de Frank Rijkaard, lo ganaría uniendo mi voz a quienes piden su cabeza. Siento decepcionar a muchos, pero miro el panorama de entrenadores que hay por ahí, y me quedo con Frank, que ya ha entrado en la categoría de mis intocables. Todavía no es un nuevo Mourinho pero en mi lista de preferencias ya lo he puesto por delante de sir Bobby Robson y Van Gaal. Con eso creo que ya lo he dicho todo. ¡Endevant, Frank!.

Positifo: que mañana tendremos la ocasión de ver en el Camp Nou los nuevos Edmilson, Essien, Malouda, Abidal, Diarra…porque el Lyon tiene una organización tan perfecta que traspasa a cada uno de esos jugadores (por una fortuna), cuando ya tiene echado el ojo al recambio ideal. Y veremos al nuevo fenómeno francés, Karim Benzema, 19 años pero en su cuarta temporada jugando partidos con el primer equipo, en el que ha ido entrando de forma gradual y ahora ya es el mesías.

Nejatifo: que Thiago Motta se haya lesionado, lo que al margen de la mala suerte que supone para el ex barcelonista, confirma el carácter gafe de su nuevo equipo, el Pupas.

¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!