Para la Liga, ¿seguimos bien?

Lo que hace sólo una semana era una afirmación –poco rotunda, eso sí- hoy es una duda metódica. Para la Liga, tampoco vamos bien. ¿No?. Y, por el modo en que se está pertrechando el más que presumible finalista de la Copa del Rey, tampoco para la Juancarling nos va a sobrar demasiado. ¡Qué penoso puede ser nuestro final de temporada! La que había de ser la temporada de los siete títulos la vamos a terminar pidiendo la hora. O cantando “¡ea, ea, ea, Rijkaard se cabrea!”. ¡A buena hora también saca el genio nuestro entrenador! ¿Por qué no lo sacaba, a su debido tiempo, con Txiki, el verdadero responsable de que la plantilla esté tan descompensada? ¿Por qué no lo sacó con el mismísimo Laporta, deseoso de hacerse la foto en la NASA y en la ONU (frustrada por las elecciones que no quería convocar)? Ahora, de cara a la galería, no ha hecho sino escenificar el “¡Tu no tienes guitmo!”. Y, ya sé que suena a caricatura de nuestra propia historia pero esa es la pura verdad: Este equipo no tiene guitmo. Y tiene el mejor tridente atacante de la Liga pero los últimos tres puntos (sobre nueve) nos lo ha dado un chaval de nuestra propia cantera, Fernando Navarro, en complicidad con el jugador más indeseado por la directiva desde Riquelme. Y gracias a ese gol no somos terceros por detrás del Sevilla, que nos tomamos a cashondeo, y el peor Madrid desde Touriño y Rubiñán. Aún necesitamos más pruebas para demostrar que no nos merecemos esta Liga. Pero, tranquilos que tenemos siete semanas de plazo.

Positifo: que la directiva de Laporta (que fue en persona a contratar el partido de El Cairo), estaba convencida de que a día de hoy el Barça tendría prácticamente la Liga en el bolsillo. Porque ningún directivo en su sano juicio habría contratado este bolo en las presentes circunstancias de la clasificación, a menos que la situación económica del club, tras el descalabro que significó la eliminación de la Champions, sea de extrema necesidad.

Nejatifo: que mientras hoy en Old Trafford se estará jugando el Manchester United-Milan, el Barça comenzará su partido de fiesta mayor en Egipto, lo que hará más ostensible la pérdida de estatus internacional del equipo en sólo un año, con dos finales perdidas (Supercopa y Mundial de clubs), y otra (Champions), lanzada por la borda con experimentos tácticos tan del gusto de nostálgicos carrinclones.

¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!