¿No fichábamos a Cristiano Ronaldo?

Cristiano Ronaldo no se toca. Lo mismo nos pasó hace un año con Thierry Henry. También son intocables John Terry, Frank Lampard, Mickael Essien y Didier Drogba, aunque digamos misa los periodistas. El “gusta”, “se ofrece”, “interesa” y demás fórmulas periodísticas utilizadas para poner la miel en los labios de los aficionados, no sirven de nada si la parte contraria no está dispuesta a vender. ¿Queréis más nombres de jugadores intransferibles? Ahí van: Paul Scholes, Wayne Rooney, Steven Gerrard, Xabi Alonso, Dirk Kuyt y Cesc Fábregas.
¿Es que los ingleses no venden? Sí, claro que venden. Nos vendieron a Petit y Overmars, ¿o es que no lo recordais?. Al Madrid le vendieron Anelka, Owen y Woodgate, sin ir más lejos. ¿Es el Manchester United el que no vende? ¡Quiá! Al Madrid le vendió a David Beckham y Ruud van Nistelrooy. A ver si nos entendemos: venden, y muy caro, aquello que ya no les interesa o que tienen superamortizado.
¿Es el Chelsea un caso aparte? ¿Vendería? Ya lo ha hecho anteriormente: nos ha vendido a Eidur Gudjohnsen por el nada desdeñable precio de nueve millones de libras (13,5 kilos de euros). El propio José Mourinho nos lo dijo, a Joan Poquí y al arriba firmante, cuando le preguntamos: “Oye, si el Barça viene a por algún jugador del Chelsea, ¿a cuál crees que podría llevarse?”. Respuesta contundente de Mourinho, oportuna y puntualmente publicada en La Vanguardia y Mundo Deportivo: “Algunos que yo no quisiera, porque sólo puede fichar los que yo no quiero. No tiene ninguna otra posibilidad”.
Pues, eso.

Positifo: que el Akasvayu Girona, con el entrenador que dio mayores títulos al Barça pero depurado por el actual régimen, esté alcanzando unos éxitos internacionales que a otros se nos niegan.

Nejatifo: que lleguemos al tramo final de la temporada, con el Madrid pisándonos los talones y un día se nos borra Eto’o en Zaragoza (y perdemos) y al siguiente se nos borra Ronaldinho ante el Mallorca. Y sufriremos.

¡Bona nit, bona sort i bon viatge a Ítaca!.