Vuelve, Thiago

Lo siento pero el Depor no puede meternos dos goles de cabeza. Y menos si juega sin Makaay, Luque, Scaloni, Valerón, Fran...o sea, si es el pálido recuerdo del Superdepor semifinalista de la Copa de Europa. Pulutant: vuelve, Thiago Motta, vuelve y pon orden en este desaguisado. La gente tenemos tendencia a creer que, en contando con los cracks, asunto zanjado y punto. No menespreciemos a los jugadores de reparto, a la clase media. Al Chelsea le pasó lo que le pasó en la ida...por la lesión de William Gallas que obligó a mi admirado Mourinho a echar mano del rústico Del Horno.
Quiero un poquito más de seguridad por alto. Muy bien Puyol de cara a la galería, recuperando balones increibles que se perdían por el pico del córner...pero muy mal en los dos goles del Depor. Si lo que queremos es buscar el aplauso fácil, adelante con los faroles. Pero el trabajo de un buen profesional no consiste solo en arrancar ovaciones y suscitar emociones en el público: también hay que evitar ataques cardíacos. Y habreis visto que no he mencionado, todavía, a Andresín Iniesta. Frank Rijkaard se lo puso a huevo en la semana en la que podía reivindicarse ante el gran éxito de Sex Fàbregas. Pero, lo siento para sus admiradores, Iniesta se crece en los partidos pequeños pero disminuye en los partidos grandes. Y, por bondad, no sacaré una lista de encuentros cruciales en los que ha sido titular.
¿El Chelsea? Lo vi ante el West Bromwich. De hecho, sólo me he perdido los partidos de FA Cup (los dos ante el Everton y el del Colchester), el de la Carling (Charlton) y alguno de los cuatro que jugó por Navidades. Tengo opinión formada sobre este superequipo que, por desgracia, se despedirá de Europa el próximo martes. Hablamos de él esta noche, pero os invito a que empeceis a decir la vuestra al respecto, que las tardes de domingo a veces se te hacen larguísimas.

Positifo: el más que aceptable estado del césped del Camp Nou, lógicamente resbaladizo en cuanto cayeron cuatro gotas.

Nejatifo: la lesión del central coruñés Andrade, que se pierde lo que queda de temporada.