¡Partido a dos goles!

Cuando me he enterado de la alineación que presentaba Rijkaard en Lisboa, os he escrito el siguiente, lacónico y claro comentario: “No m’agrada l’equip”. Motta no puede jugar de central: se ha ganado dos expulsiones y ha cometido un penalti de libro que también le habría impedido jugar el partido de vuelta. Con la delantera del Benfica estaba clarísimo que Rodri podía jugar perfectamente. ¿Iniesta de titular? ¡Cómo lo he encontrado a faltar saliendo del banquillo en el minuto 60!. O sea que para meter a Andresín como titular hemos cometido un suicidio defensivo (perdonado por la benevolencia arbitral), hemos tenido un medio campo menos potente, se nos ha ido Deco cabreado (aún ignoro por qué) y nos hemos perdido la ocasión de ver a Rodri como titular del Barça en un partido de Copa de Europa. Al final, hemos fallado muchísimo en ataque pero si descontamos que las tres mejores ocasiones nos la ha regalado el amigo Moretto, que en teoría debía defender la portería benfiquista, llegamos casi a la conclusión de que entre las ocasiones originadas en buenas jugadas del Barça y las que ha creado el Benfica ante Valdés, no ha existido tanta diferencia. Ahora nos vemos obligados a imponer esa diferencia en el partido de vuelta, con un Benfica que ya nos habrá perdido el respeto, que habrá ganado en autoestima y que recupera a Nuno Gomes. Y no estaremos tranquilos hasta que les hayamos metido un par de goles como mínimo porque, imaginaros esas escapadas de Miccoli, de Nuno Gomes o de Simao en los últimos diez minutos con un 1-0 en el Camp Nou…

Positifo: el golazo de Cesc Fàbregas que después ha coronado con un pase no menos excelso a a Thierry Henry. La vecchia signora, follada y bien follada (con perdón, milady), por un jovencísimo Arsenal. Los gunners empiezan a ser algo más que una anécdota.

Nejatifo: que el Barça no haya podido contar con más seguidores en Lisboa, por lo mal que se gestiona desde el club la distribución de las entradas y por la no organización de la prometida caravana blaugrana.

¡Bona nit i bona sort!