Gracias, Señor, por los resultados recibidos

He visto el mismo Barça gris de los últimos partidos, aunque con mayor capacidad para crear situaciones de gol. Aunque Messi haya vuelto a marcar, yo creo que el Barça juega mejor, es más él mismo, cuando Giuly está presente en el equipo. Ofrece más posibilidades de pase a los centrocampistas, irrumpe por velocidad y tiene gol y pase. Hoy no ha marcado pero ha dado el gol a Larsson y ha estrellado tres balones en los postes.
Todo lo demás entra de lleno en la vulgaridad, porque las ausencias simultáneas de Xavi (para mí la más sentida), Deco, Motta y Eto'o, tienen que pasar obligatoriamente factura. Por suerte, no la pasan en forma de resultados, lo que quiere decir que el equipo está fuerte en el aspecto anímico y que los suplentes saben cuándo es el momento de que demuestren su nivel.
¿Larsson? Lástima que su gran temporada azulgrana tenía que ser la pasada. Me recuerda en casi todo al Luis Enrique de final de carrera: todo voluntad, fuerza, entrega, sintonía con la grada, actitud positiva y solidaria. Pero...que no lo tengamos que utilizar muchos partidos más que como recurso.
Cuando salió hace unos días el tema Henry, me pronuncié por el perfil de un jugador que considero el ideal para presionar a las estrellas del equipo: David Villa, el del Valencia. Ahora ya no está a nuestro alcance pero sería bueno tratar de "descubrir" al nuevo Villa del fútbol español. No creo que sea Soldado. ¿Aritz Aduriz del Athletic? Podría ser. Cualquiera antes que Fernando Torres, por muchos tejanos que venda.

Positifo: (desde la óptica barcelonista) el bache en el que ha entrado el Chelsea, maquillado con resultados engañosos como el de la semana pasada en casa del colista Sunerland. Ayer, con Pelé como testigo de lujo en el palco de Stamford Bridge, el equipo dio una pobre imagen y, por segunda semana consecutiva, termina con diez (la semana pasada, Robben expulsado; ayer, Ricardo Carvalho). Comento este bache en mi columna "Mundo esférico", del suplemente de los lunes en La Vanguardia.

Nejatifo: (y nefasto) la cantidad de penaltis, creo que seis, que se pitan en la Liga española. Lo escandaloso no es la cifra, elevada, sino que los que claramente no deberían pitarse, siempre revierten en los mismos equipos (el Barça, líder, no se puede quejar al respecto).