¡Hala! ¡a la vendimia!

El año pasado, sólo hubo un equipo español –el Villarreal en Copa de la UEFA- capaz de superar los cuartos de final de una competición europea. No tuvimos presencia en ninguna de las dos finales, ni consecuentemente en la Supercopa ni vamos a tenerla en la Intercontinental. Por si esas evidencias no bastaban para mostrarnos una realidad más bien depauperada, viene la Intertoto y ni siquiera esa puerta de servicio de las competiciones europeas les fue franqueada al Athletic, Valencia y Deportivo. De seguir así, pronto volveremos a ser europeos de segunda y a países como Francia, más que ir a jugar a fútbol iremos a la vendimia (y a mucha honra).
Claro que aquí, ni nos enteramos. El Barça lleva dos años siendo el mejor equipo del mundo y el Madrid de la galaxia y no pasan de octavos de final…Como no hay ser humano que se sienta más libre que un estúpido, tenemos total libertad para repetirnos que somos los mejores, los favoritos, que vamos a darles una lección de fútbol a todos esos técnicamente inferiores pero jodidamente superiores en suerte, en practicar en campos impracticables, en juego subterráneo, en conocerse los entresijos del reglamento, en preparar encerronas. ¿Me lo invento? Lo pregunto porque hace tiempo que quito la voz a la televisión pero, si mal no recuerdo, antes la banda sonora de los partidos recogía muchas justificaciones de esas. ¿Ya no los comentan así, los partidos de España y de los equipos españoles? En tal caso, volveré a poner la voz de la televisión.
No podrá ser hoy porque viajo a Sevilla para presenciar in situ el Betis-Liverpool. A ver si a los verdiblancos les sale otro partido como el de Mónaco y pasamos una noche fetén. Personalmente, tengo a Ricardo Oliveira entre mis jugadores predilectos, y a Serra Ferrer lo valoro mucho más como entrenador –como entrenador del Mallorca y del Betis- que por su trabajo como director técnico del Barça. Y de su etapa fugaz como entrenador del Barça, guarda una cuenta pendiente con el Liverpool, aquel aburridísimo Liverpool de Gérard Houllier, que apeó al Barça de la Copa de la UEFA.
Lo que son las cosas: cinco años después, Houllier recibe hoy como entrenador del Olympique Lyon al Real Madrid y Serra Ferrer recibe al ex equipo del entrenador francés, el Liverpool. ¡Qué pequeño es el mundo del fútbol!

Positifo: El resurgir esperanzador de dos equipos gallegos que sólo hace un par de temporadas se hacían respetar en la Liga de Campeones para caer después muy por debajo del nivel que les corresponde. Si Valencia y Atlético se animaran a seguir sus pasos, podríamos tener una liga muy divertida.

Nejatifo: que se aplaudan los errores arbitrales, aunque perjudiquen a nuestros rivales. Cuando un balón no traspasa la línea de gol, no debe concederse el tanto. Claro que cuando el perjudicado es el Chelsea (falso gol del Liverpool en la Copa de Europa) o el Madrid (falso gol del Chelsea), parece que esté justificado. Que un árbitro se equivoque me parece una desgracia; que su equivocación se reciba con alborozo me parece mezquino.

Date un garbeo por Ítaca, Iván de la Peña